sábado, 24 de septiembre de 2011

¡¿UNIVERSIDADES FEMENINAS?!



Bienvenidos un curso más a este blog que, con el paso de los años, va camino de hacerse responsable. Todas las opiniones, si son razonadas, son bienvenidas. Aunque no sean razonables.

Empezaremos por un asunto de coeducación y género ("coed/single-ed and gender equality").“Co-educación” significa no separar a mujeres y varones en los centros educativos. Muchos profesoras creemos que, más allá de esto, se trata de que ni en las aulas ni en los campus se reproduzcan las relaciones de poder que alimentan el machismo y la discriminación sexual. En España un debate recurrente es el tratamiento que deben tener los colegios “no mixtos”. En nuestro país hay colegios, pero no universidades “sólo para mujeres” o “sólo para hombres”. En Estados Unidos e Inglaterra surgieron en la primera mitad del S. XIX universidades especiales para mujeres. Se trató de una solución de compromiso: no se les permitía el acceso a las universidades convencionales pero se pretendían que tuvieran una educación seria, más allá de las habilidades necesarias para encontrar un buen marido. Una de esas universidades es el norteamericano Wellesley College, donde transcurre la película La sonrisa de Mona Lisa. Nuestra Facultad tiene un convenio con este college, y con otros también exclusivamente femeninos como Smith College y Mount Holyoke College.

En los años cincuenta, cuando transcurre la historia de La sonrisa de Mona Lisa, los países occidentales estaban llenos de prejuicios sexistas, pero hoy podríamos preguntarnos qué sentido tienen estas universidades femeninas. Lo sorprendente es que Hillary Clinton, Madeleine Albright, Sylvia Plath y el ¡42% de las diputadas! en el Congreso de Estados Unidos han estudiado en centros de este tipo (que son sólo el 3% de las universidades norteamericanas). Sus resultados son, por tanto, extraordinarios. Las defensoras de este tipo de centros dicen que, al no haber varones, las mujeres desarrollan cualidades de liderazgo y cooperación que no se consiguen mediante la co-educación…
Y ahora viene la pregunta. En 1982 un hombre solicitó ser admitido en la prestigiosa Escuela de Enfermería de la Mississipi University for Women. La universidad le rechazó, y el recurrió a los tribunales: ¿qué creéis que pasó? ¿cuál creéis que, en todo caso, debería haber sido la decisión de los tribunales?