"Voy a asumir que los murciélagos tienen experiencia. Después de todo son mamíferos, y no hay más dudas sobre que ellos tienen experiencia de lo que la hay en el caso de ratones, palomas o ballenas... Los murciélagos, aunque más estrechamente relacionados con nosotros que esas otras especies, sin embargo tienen un tipo de actividad y un aparato sensorial tan diferente del nuestro que el problema que quiero exponer se hace especialmente vívido (aunque ciertamente también se presentería respecto de otras especies)...
La esencia de creer que los murciélagos tienen experiencia radica en que hay algo que es como ser un murciélago. Actualmente sabemos que hay muchos murciélagos (el microchiroptera, para ser precisos [que sale en la foto]) que perciben el mundo exterior principalmente mediante sónar o ecolocalización, esto es, detectando en un cierto rango de objetos el reflejo de sus propios chichidos de alta frecuencia, extremedamente rápidos y sutilmente modulados. Sus cerebros están diseñados para correlacionar los impulsos sónicos salientes con los subsecuentes ecos, y de este modo la información adquirida permite al murciélago realizar precisas determinaciones de distancia, tamaño, forma, movimiento y textura comparables a aquellas que logramos mediante la visión. Pero el sonar, aunque sea claramente una forma de percepción, no es parecido en su funcionamiento a ninguno de nuestros sentidos, y no hay razón alguna para suponer que es subjetivamente como ninguna cosa que podamos experimentar o imaginar. Esto parece que provoca dificultades en la noción de qué sería ser como un murciélago. Porque deberíamos pensar si hay algún método para extrapolar la vida interior del murciélago desde nuestro propio caso, y si no qué métodos alternativos podrían existir para entender qué es ser como un murciélago.
Nuestra experiencia propia nos proporciona el material básico de nuestra imaginación, cuya amplitud es por eso mismo limitada. No nos ayudará tratar de imaginar que tuviéramos membranas en nuestros brazos, con las cuales pudiéramos volar en la oscuridad cazando insectos con la boca... tampoco ayudará que nos imaginemos todo el día colgando de los pies cabeza abajo... Ésa no es la cuestión. Lo que yo quiero saber es cómo es para un murciélago ser un murciélago".
Thomas Nagel, Cuestiones mortales (traducción propia)
La esencia de creer que los murciélagos tienen experiencia radica en que hay algo que es como ser un murciélago. Actualmente sabemos que hay muchos murciélagos (el microchiroptera, para ser precisos [que sale en la foto]) que perciben el mundo exterior principalmente mediante sónar o ecolocalización, esto es, detectando en un cierto rango de objetos el reflejo de sus propios chichidos de alta frecuencia, extremedamente rápidos y sutilmente modulados. Sus cerebros están diseñados para correlacionar los impulsos sónicos salientes con los subsecuentes ecos, y de este modo la información adquirida permite al murciélago realizar precisas determinaciones de distancia, tamaño, forma, movimiento y textura comparables a aquellas que logramos mediante la visión. Pero el sonar, aunque sea claramente una forma de percepción, no es parecido en su funcionamiento a ninguno de nuestros sentidos, y no hay razón alguna para suponer que es subjetivamente como ninguna cosa que podamos experimentar o imaginar. Esto parece que provoca dificultades en la noción de qué sería ser como un murciélago. Porque deberíamos pensar si hay algún método para extrapolar la vida interior del murciélago desde nuestro propio caso, y si no qué métodos alternativos podrían existir para entender qué es ser como un murciélago.
Nuestra experiencia propia nos proporciona el material básico de nuestra imaginación, cuya amplitud es por eso mismo limitada. No nos ayudará tratar de imaginar que tuviéramos membranas en nuestros brazos, con las cuales pudiéramos volar en la oscuridad cazando insectos con la boca... tampoco ayudará que nos imaginemos todo el día colgando de los pies cabeza abajo... Ésa no es la cuestión. Lo que yo quiero saber es cómo es para un murciélago ser un murciélago".
Thomas Nagel, Cuestiones mortales (traducción propia)
18 comentarios:
Inés Salinas del Rey
Hay constancia de experiencias desarrolladas en las que además de ser capaces de percibirse los seres humanos como sujetos, otros seres de otras especies también logran esta capacidad.
-Asi lo hacen los delfines de nariz de botella, elefantes asiáticos y los grandes simios ( los monos parecen llegar a un estado intermedio, en el que distinguen entre su propia imagen y la de un extraño pero sin tener conciencia de si mismos.
El hombre parece ser que comienza a darse cuenta de su imagen reflejada en un espejo a partir del año de edad.
Este hecho resulta muy importante pues a partir de ese momento comenzamos a formarnos una imagen de nosotros mismos comenzando a relacionarse nuestro interior y nuestro cerebro con nuestra imagen externa que es la imagen reflejada en el espejo.
Mirándome en un espejo largo rato percibo que he ido cambiando mucho a lo largo de los años, sin embargo soy yo. Un yo que no se limita a un cuerpo o a una cara, sino que es una comunicación con mi interior, como si mi interior me hablara a mi misma.
De cualquier manera, la capacidad que tienen muchos animales de autorreconocimiento nos conduce a lo que se denomina “frontera biológica del Yo”
De acuerdo con dicha frontera, unos animales son sujetos, yoes, y otros tienen el nivel de conciencia no unificado en un yo.
Habría que distinguir entonces entre animales-sujetos y animales –no sujetos o autómatas según tengan o no conciencia de si mismos, es decir según hayan o no dado ese salto evolutivo.
La vida psíquica parece ser vinculada al desarrollo eucariota pluricelular, en nuestro caso ciertas células especializadas denominadas neuronas.
Sin embargo la Naturaleza no se ha conformado con la generación de sistemas nerviosos y ha desarrollado sistemas autorreferenciales, es decir, un poder referirse a si mismo constituyendo la base de la identidad del sujeto.
Casi todos los animales demuestran capacidad de aprendizaje en algún grado, y por tanto cabe considerar la inteligencia como un cualidad que recorre toda la escala animal. Los espejos no solamente reflejan el cuerpo del individuo, sino que activamente operan como herramientas de desarrollo del yo, en cuanto que enlazan la autopercepción del sistema nervioso y la imagen del propio cuerpo.
Un murciélago no puede verse reflejado en un espejo pero también se comunica con sus sentidos con el exterior. Recibe del exterior una imagen no visual en su cerebro que le permite "ver" hacia donde va. Quizá no podamos saber que es "como ser un murciélago"pues no tenemos su aparato sensorial. Igualmente un invidente de nacimiento no puede saber que es "ver". Según el grado evolutivo de la especie y según los sentidos que tengamos desarrollados percibimos de un modo distinto el exterior y la "realidad"...
Por favor, Rafael no utilices la palabra anglosajona "rango" que es una mala traducción de "range", es más apropiado traducirla por intervalo.
El rango se aplica en castellano a lo militar,
Muchas gracias por la precisión sobre la traducción. Aunque las formas siempre importan, y desde luego también en el uso de la lengua, no es un asunto fundamental para nuestra reflexión. No deseo entrar en ninguna controversia sobre el asunto (y más no sabiendo quién usa el nombre "Raquel"). De todas formas, te precisaré que efectivamente el término inglés es "range", y que la traducción por "intervalo" efectivamente es apropiada, pero también lo es "rango". Este término no tiene sólo un sentido militar sino que una de las acepciones del DRAE es "amplitud de la variación de un fenómeno entre un límite menor y uno mayor claramente especificados", y en este sentido es un sinónimo de "intervalo" como puedes comprobar en el DRAE.
Gracias por tu participación
Volviendo al tema de los murciélagos...
Pienso que en cierto modo sí podemos tener (si no ahora mismo, muy pronto) la experiencia de ese "aparato sensorial tan diferente" que tienen los murciélagos: seguramente, existirá un sensor o algo que nos permita, mediante ondas, recoger a la distancia a la que se encuentra un objeto y el volumen que ocupa. De esta manera si nos vendan los ojos o si la persona es invidente podría desplazarse utilizando el sentido tan especial que tienen desarrollado estos animales.
Sin embargo, creo que la cuestión no es esa, sino el experimentar cómo es ser un murciélago interiormente. Antes de tratar esta cuestión me he preguntado lo siguiente: si los seres humanos, (cuya semejanza proteínica y cromosómica es de un 99 por ciento) no somos capaces, por suerte, de "ser o estar" en otras personas, ¿cómo vamos a conocer la vida interior de otro animal cualquiera?
Las personas podemos, en mayor o menor medida, ser capaces de predecir algunos comportamientos de nuestros semejantes; pero, esto también lo hemos conseguido con los animales. Yo creo que la mente es como una caja fuerte: está completamente cerrada a toda persona que no sea su dueña y, por lo tanto, no podemos conocer cuáles son sus entresijos.
El ser no se refiere a la forma que tenga un cuerpo, sino a la capacidad de pensar y de tener autoconciencia. La mente humana se caracteriza por ser biográfica, por ser asumida personalmente y porque puede ser vivida "desde dentro", desde una intimidad. Además, es necesariamente individual, no es algo genérico, es la vida de cada uno, con sus posibilidades e imposibilidades.
Cada vida humana es la realización particular de una determinada cultura y de la forma de interpretarla y, por lo tanto, también de unas experiencias que se derivan de ese modo de vida. Lo importante no sería el cuerpo, sino esa "parte" invisible que es lo que nos caracteriza a cada uno de nosotros a lo largo de nuestra vida.
Le pregunto a Inés acerca de esas afirmaciones sobre la autoconsciencia de los animales...Tenía entendido que el ser humano es el único capaz de conocer su propio conocimiento y de pensar que está pensando, es decir, que es autoconsciente. ¿Tal vez te refieres solo a la autoconsciencia física? Creo que no lo entiendo muy bien.
Os pido que leáis ahora, por lo menos, los primeros párrafos del texto que aparece en esta página:
http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/euro/kafka/metamor.htm
Creo que nos puede ayudar a reflexionar sobre el problema mente-cuerpo que hemos tratado en clase. ¡A mí este tema me gusta mucho y me gustaría conocer vuestras opiniones!
Acabo de darme cuenta de que no se ha copiado bien el enlace a la página de la lectura. Ahí va de nuevo, espero que esta vez vaya bien:
http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/euro/kafka
Inés Salinas del Rey
Aunque tendemos a humanizar los comportamientos animales, me refería a la imagen que tiene un mono de si mismo al verse reflejado en un espejo...si asume que se da cuenta o no, no es sabido, pero si que se reconoce asi mismo...seguramente sin llegar a tener autoconciencia...de esto hay mucho que descubrir aún según he leido por ahí...
Tengo un cocker spaniel y muchas veces me he preguntado ....¿"que pensará de mi cada vez que le pongo su chalequito impermeable cuando llueve y lo voy a sacar?"...seguramente no pensará nada...pero no puedo ser un cocker para intentar saber que piensa si es que piensa algo...y tampoco puedo ser un murciélago, claro está.
Efectivamente, yo creo que tu cocker no pensará nada, al igual que el resto de los animales. Simplemente porque no tiene capacidad para articular un lenguaje sintáctico. Podría tener un lenguaje simbólico y por eso decías, en el comentario anterior, que se veían en el espejo algunos animales...porque los animales pueden hacerse representaciones.
Lo que creo que está claro es que en los animales la falta de pensamiento abstracto, la capacidad de establecer categorías, el planeamiento de algo futuro e incluso la creatividad/imaginación, son obstaculizados por la falta de un lenguaje articulado. Una inteligencia superior, es decir la capacidad de encadenar elementos simples para obtener resultados complejos , necesita del lenguaje sintáctico para poder tomar efecto.
Los animales no pueden entender por qué se les pone un chubasquero, pero tampoco creo que se lo puedan llegar a plantear.
Por lo visto segun ví en un reportaje de National Geographic en Canal 2 Andalucía los murcielegos no pueden detectar a pesar de su perfeccionado aparato emisor-receptor las telas de araña.
Una tela de araña que diera la vuelta al mundo pesaría únicamente 240 gramos.
Las arañas aprovechan esta ceguera de los murcielagos a las telas para cazarlos.
Concluyo del texto que un "toro" posee también una identidad aunque no se si se reconoce en un espejo. Desde luego todas las investigaciones indican que posee un sistema nervioso complejo capaz de sufrir enormemente durante las corridas de toros.
¿Cómo percibimos la realidad moral del tormento a que se ve sometido un toro en una corrida en un entorno, Córdoba, donde los toreros son convertidos en académicos?
¿Podemos reflexionar sobre algo moral que es abstracto y a la vez cercano?
Inés Salinas del Rey
La realidad moral del tormento... no entiendo bien este concepto.
Algo moral que es abstracto...Es evidente que el tormento o martirio a que es sometido un toro durante una corrida de toros de la que "tan orgullosos se sienten muchas personas" es algo real según avalan estudios e investigaciones, es medible, es cuantificable. El toro sometido a un estres ante el dolor y el miedo libera una cantidad de adrenalina muy elevada. Incluso en las carnicerias he oido alguna vez el comentario de: ..." no le vendo este rabo de toro de lidia hoy pues es de la corrida de ayer y la carne está aún muy dura..." . Eso es debido a esa adrenalina liberada, en general catecolaminas que provocan unos signos en el animal muy claros y que en términos médicos son realmente cuantificables.
hola de nuevo
Quisiera apotar unos datos a la discusión.
Creo que ya se ha demostrado que ciertos animales tienen autoconciencia, los delfines, ciertos monos, ballenas, elefantes etc... y no me refiero con esto a que se reconozcan en un espejo, sino a una autoconciencia parecida a la nuestra, es decir, conscientes de su existencia. No puedo aportar datos precisos pero creo haber visto algún documental al respectos en el que demuestran estos hechos. Y en otro aspecto se ha demostrado también que los animales no solo poseen lenguajes complejos sino también cierta inteligencia matemática, capacidad para el arte (los monos hacen cuadros que incluso venden caros), sociedades e incluso culturas
propias (los elefantes lloran a sus muertos). Se plantea pues, donde está la barrera entre el hombre y el animal. Se ha demostrado que estos tienen todas esas características "humanas", eso sí, menos desarrolladas, la exclusiva ya no es sólo nuestra. Es posible que se pueda pensar que no nos diferencia nada de los animales, excepto que tenemos mayor capacidad, más amplitud en esos aspectos. Hay un libro y película muy divertida que se llama "Guía del Autoestopista Galáctico", de Douglas Adams (o Adams Douglas, no recuerdo cual era el nombre o el apellido) en la que insinúa de modo irónico que en la tierra hay tres especies inteligentes. Nosotros tenemos el tercer lugar en inteligencia adelantados por los delfines. La primera no la digo por si alguien quiere verla/leerla. Quizás se pueda decir que la diferencia entre el hombre y el animal es que nosotros poseemos libertad aunque habría que establecer que es la libertad. Eric Fromm dice que el único acto o pensamiento libre es el acto o pensamiento original, original para uno mismo, pero que al estar cargados de influencias ese acto original libre sólo puede darse en los actos expontáneos que están vacíos de toda influencia o causa-efecto, la libertad está en la expontaneidad personal. Bueno ese sería otro tema a tratar pero creo que nos alejamos del verdadero sentido del texto.
Retomando el tema del texto y cambiando la pregunta de "¿cómo es para un murciélago ser un murciélago". a ¿si yo fuera un murciégalo?(sí sí murciégalo, id a la RAE y arrepentíos por juzgar mi lenguaje), ¿si todos fueramos murciégalos? ¿Como nos veríamos? Pues creo que internamente, de manera personal, no cambiaríamos mucho. El cambio sería en la relación con la realidad. Si nos fijamos hemos creado un mundo basado en la relación sensorial con el mundo. Todo es visual, pues es el sentido que mas usamos, luego nos deleitamos con la comida porque tenemos gusto, nos agrada la música porque tenemos oído etc. Si fuesemos murciégalos todo lo creado por el hombre tendría otro sentido. No podría asegurar como sería este mundo pero puedo imaginarnos a todos viviendo colgados, hacia abajo, con edificios en el cielo, toda nuestra vida relacionandonos entre las nubes. Llegaría un momento de nuestra historia que dominaríamos el suelo gracias a un invento con ruedas que nos permitiera movernos por esa peligrosa zona inexplorada (esto ocurriría con una civilización murciélaga ya avanzada, una civilización tecnológica). Con esto quiero decir, que ese medio por el cual conocemos la realidad (los sentidos) tambien condiciona la realidad misma en la que vivimos. La modifica para adaptarla a las necesitades de los propios sentidos pero que una vez trasmitida a nuestra mente, el tratamiento que hace la mente, no debe ser muy diferente al que tenemos nosotros como humanos. Entre la realidad y nuestro conocimiento de ella hay demasiados filtros, empezando por los sentidos y acabando en la mente misma, como para asegurar que lo que nos llega es la realidad misma. Descartes dice que lo que nos asegura que eso es posible son las matemáticas. Que hacen de puente, de enlace entre nuestra mente y la realidad. Bien, continuando con la discusión del martes, decir que aunque presuponamos que las matemáticas estén ahí. Que sean algo válido que nos sirvan de puente. Para conocerlas debemos hacerla pasar por nuestros filtros. Dijo Rafael que las matematicas no tienen que haber sido creadas por el hombre, sino que son algo que están ahí y que el hombre descubre. Acepto esto pero creo que a la hora de "descubrir" las matematicas tienen que pasar igualmente por esos filtros. Es imposible saltarse la subjetividad de la mente. Entonces ya no tenemos las matemáticas puras sino una matemática adulterada por la mente. Si os digo la verdad no sabría como salir de este escepticismo sin recurrir a un Dios o una verdad de fé, espero que cuando ahondemos en estos temas algún filósofo pueda superar este subjetivismo, porque ahora mismo me niego a recurrir a Dios o a vivir pensando que es imposible asegurar nada de la realidad. XD.
Un saludo a todos
¿Qué es ser murciélago? Sin duda se trata de una pregunta cuya respuesta está más allá de nuestro propio entendimiento. No somos capaces de poder decir cómo es eso de ser murciélago con exactitud, sino que únicamente podemos expresar cómo creemos nosotros que sería ser murciélago y, claro está, no estarías respondiendo con total veracidad a la pregunta. Para poder hacerlo tendríamos que ser capaces de desprendernos de nosotros mismos, de salir de este “envase” que llamamos cuerpo e introducirnos en el del murciélago. Pero quizás, ni tan siquiera de este modo fuésemos capaces de conocer lo que es ser murciélago verdaderamente, pues habríamos llegado al cuerpo del animal con nuestra mente y capacidad de percepción por equipaje. Así, aunque existan animales que parecen tener autoconciencia, el murciélago no es por ahora uno de ellos, así que para sentirnos murciélagos tendríamos que dejar a un lado nuestra autoconciencia, cuando ésta es algo prácticamente innato al ser humano. Además, si lográsemos desprendernos de esta autoconciencia, no podríamos pues decir cómo es ser murciélago, porque no seríamos concientes de que estamos siendo tal animal. Pero, creo, igual sucedería si intentásemos explicar qué es ser otra persona. Me refiero a que si en lugar de salir de nuestro “envase” y meternos en el del murciélago, nos metiéramos en el “envase” de otro ser humano, tampoco podríamos decir cómo es ser esta otra persona a pesar de seguir teniendo autoconciencia (porque en este caso no tendríamos que desprendernos de ella). Aquí entran en juego nuestro prejuicios, nuestros sentidos, en definitiva, nuestra captación de la realidad que, en mi opinión, es diferente en cada ser humano. Pues los sentidos nos hacen crearnos una concepción de realidad que sin duda es diferente a la de la persona que tengo al lado y, más aún, si tenemos en cuenta las ideas o prejuicios que cada uno se va creando de la realidad, todo ello recogido y “procesado” por nuestra mente. Así, no tenemos una visión real de la realidad pues, como dice Sergio, los sentidos actúan de filtros manipulando nuestra visión de la realidad. Quizás la existencia de un dios que armonice estas diferentes e infinitas maneras de concebir la realidad no sea la solución más factible y menos aún en una sociedad tan escéptica y gregaria como la nuestra. Más bien debiéramos pensar en el lenguaje como ese instrumento que armoniza las diferentes percepciones de la realidad que tenemos los seres humanos creando un consenso, una realidad que aparentemente es la misma para todos los humanos. Desbancaríamos así la teoría cartesiana de que son las matemáticas el medio que relacionan la realidad con nuestra concepción de la realidad, y entraríamos a apostar, quizás, por una filosofía analítica (el segundo Wittgenstein, por ejemplo) en la que todo se reduce al lenguaje.
Un murciélago puede percibir la realidad según los últimos avances, pero el desarrollo de su cerebro esta muy lejos del humano. Por mucho que tengan desarrollado su conocimiento, el humano seguirá siendo infinitamente superior al del cualquier mamífero que haya.
Pero lo difícil es saber cual es límite hasta donde puede llegar el conocimiento de los animales, los compañeros han hablado de los elefantes, de los monos, de los perros... en definitiva por muchos animales que nombremos ninguno van a estar al alcance del ser humano.
Ya termino haciendo alusión a lo que puse en primer lugar, como qué es ser como un murciélago?. ¿Porque no nos hacemos la pregunta, como es ser como un ser humano?. Ya que en ocasiones ve uno cosas que no se puede explicar como las puede hacer un ser humano.
La “razón” en el lenguaje: ¡oh, qué vieja hembra engañadora! Temo que no vamos a desembarazarnos de Dios porque continuamos creyendo en la gramática (con permiso de Nietzsche).
El comentario anterior es un error. Yo quería decir esto:
La “razón” en el lenguaje: ¡oh, qué vieja hembra engañadora! Temo que no vamos a desembarazarnos del yo porque continuamos creyendo en la gramática (con permiso de Nietzsche).
Gloria Santos se ha muerto. Vaya grandisima mala suerte. Tanto "hijo de puta" que sigue vivo y precisamente grandísimas y notables personas nos abandonan.
El mundo es muy injusto y en navidades más aún.
Un homenaje para GLORIA en estas páginas de filosofía moral.
no soy filosofo ni aspiro a serlo, pero al leer sus post me quedo la duda si es que el "auto-reconocimiento" que plantean lo limitan con intensión al sentido de la vista, por que a mi saber, la mayoria de los animales funcionan mas en torno al olfato que otro sentido. me gustaría pensar que somos los únicos que nos reconocemos como individuos, con cierto nivel de conciencia, pero se que un perro por ejemplo sabe cual es su olor, por lo que marca su territorio, reconoce uno ajeno, se posiciona en una piramide jerarquica y en estado salvaje cumple un rol en la manada
Con respecto al comentario de Inés Salinas del Rey.
Creo que deberiamos de concentrarnos en el pasaje que dice: "Mirándome en un espejo largo rato percibo que he ido cambiando mucho a lo largo de los años, sin embargo SOY YO. Un yo que no se limita a un cuerpo o a una cara, sino que es una comunicación con mi interior".
Cualquiera sea la forma de Vida, DETRAS de ella HAY "algo o alguien" que SIENTE (experimenta). Por lo tanto habria que enfocarse en dilucidar que es SENTIR, y como ha evolucionado este segun las formas de VIDA adoptadas, hacia donde parece ir con la aparicion del libre albedrio, la razon, la imaginacion, en el seno de la CONCIENCIA, es decir del SENTIR "DETRAS" de cada organismo.
muy bueno el blog un abrazo
Parece ser que la CONCIENCIA evoluciona hacia el DESPERTAR TOTAL, es decir hacia el ACLARAMIENTO implicito en el DISCERNIMIENTO, lucidez, agudeza mental, CLARIVIDENCIA, INSIGHT, es decir hacia el estado MENTAL de REALIDAD. Esto implicaria una evolucion INTERNA, siquica, del SENTIR mismo DETRAS de lo organico, hacia "desprenderse" de lo organico en el HECHO siquico de DESPERTAR, como si llegaramos al OJO del remolino que es la vida de cada SER, SUMERGIDO como sentir en la EXPERIENCIA fisica y mental concomitante, con base en el cuerpo y la memoria alrededor.
Abrazo amigos
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